Estupenda e inclasificable película sueca dirigida por Ruben Ostlund e interpretada por Claes Bang, Elisabeth Moss, Dominic West y Terry Natary.
La cinta recibió la palma de oro en Cannes y está nominada a los Oscar como mejor película extranjera, la veo con opciones de ganarlo.
Aviso hay algún spoiler.
Nos cuenta la historia de un director de un museo de arte contemporáneo, interpretado magistralmente por Claes Bang. Descubrimos que tras la fachada de una persona responsable y segura se esconde una personalidad vulnerable y patética que vamos descubriendo a partir de sus conductas sociales.
Su falta de profesionalidad y dejadez provocan un escándalo público, debido a una publicidad escandalosa sobre la próxima obra que se va a exhibir el museo "The square".
Me gusta la escena del robo de la cartera y en las que sale el niño amenazando al director.
Hay una escena que es imposible de olvidar y realmente no se si me encanta o la detesto, lo que es cierto es que tiene una gran fuerza y te engancha de una forma sorprendente, me refiero a la performance del que podíamos definir el artista-mono durante una lujosa cena. Aquí nos podíamos plantear si hay límites o no para mostrar una propuesta de arte o todo vale, muestra una situación surrealista con aires entre Tinto Brass y Federico Fellini.
Lo que menos me gusta es que la cinta es bastante deslabazada, quizás algo menos de metraje (142 minutos) hubiera ayudado a centrar la historia en un guión menos disperso.
Os dejo con una de las piezas clásicas que se escuchan en la banda sonora Air on the G. String (Suite Nº3, BWV.1068) de J.S. Bach.
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